Después de catorce años y medio vuelo a este lugar de letras, que en un momento fue para dedicar mi desencanto e intentos de ser poeta. Esa vez tuve el corazón roto por varios meses y decidí dejar de escribir porque este espacio me recordaba ese amor lejano, idealizado, inmaduro y virtual.
Lo que me trae a este lugar de nuevo, son la reminiscencias del tiempo, de los desamores y amores, una situación similar con protagonistas diferentes. De tener quince años más y ver atrás esos caminos de vida hasta hoy recorridos.
Después de darle una ojeada a esta bitácora o diario, sé que hay volverle a meter mano y mantenerlo. Cositas por ajustar y poner en orden.