7 March 2008

Ángel

--¿Que puedo decir de vos?
jajajaja, mire mis alas, ¿nocierto que son muy bonitas?
--¡¡Claro!!, las encuentro útiles para mi colchón y mi almohada.
¡¡cómo se le ocurre!!
--Las plumas me encantan.
¿cómo cree que se las voy a dar?
--Le apuesto que sí, le apuesto que ésas alas serán materia prima para mi lecho.
¿qué cree, que soy fácil de comprar?
--No, no sos fácil de compar. Pero si sé .... (una gran sonrisa en la cara)
mmmm (muecas...)
(tiempo después)
--¡¡¡Tarán¡¡¡¡, ¿adivine adivine.....
¿adivino qué?
--¿Qué tengo en a la vuelta de la esquina?
No sé. (asombro)
-- muévase.. y mire.
(Se vá caminando y voltea la esquina, solo se le alcanzan a ver las alas, de repente se le caen y el otro se llena de satisfacción)
-- Jejejejejeje, ahora podré hacer mi lecho tal cual lo he soñado.

Alguien despierta en una cama suave y tersa, a su lado se encuentra su compañera,se levanta, va al baño y se mira al espejo, voltea para verse la espalda y observa un par de marcas tenues en la parte media, retorna al cuarto, y alcanza a ver un pequeño objeto que sale de la almohada, se acerca y con sorpresa se dá cuenta que es una pluma.

Mientras tanto en otro lugar,en otro espacio, alguien se acuesta cómodo y piensa:
--- Bueno, por lo menos alcanzó para los tres.

3 comentarios:

Roxi said...

Qué miedo!
Y cómo pudo convencer al ángel, que es eso que había en el rincón tras la puerta?
Me quedé intrigada o no entendí
Abrazo!

: ) said...

Eeeeh ??

LILO said...

hola arawacO.. como tass? espero que muy bien, me han gustado muchisimo los comentarios que has dejado en mis posts...me dejan pensando y es dificil, pero me dejan sin palabras... gracias de nuevo..un gran abrazO